En cada escenario económico funciona mejor un determinado tipo de activo.
A continuación veremos cuatro escenarios económicos y qué activos son los que suelen funcionar mejor en cada uno.

En épocas de crecimiento económico, expansión o prosperidad aumenta la actividad económica, se crea más empleo, se incrementa la inversión y también el consumo. Los tipos de interés bajan, por lo que los bancos conceden crédito con mayor facilidad. La bajada de tipos también afecta a los bonos a largo plazo que suben de precio. Las acciones también tienen un buen desempeño en este ciclo.
Por el contrario en fases de recesión disminuye la actividad económica, aumenta el desempleo y se reduce la inversión y el consumo. Es este un ciclo de rendimiento negativo para la mayoría de activos. Se caracteriza por la acumulación de liquidez o efectivo por parte de los inversores.
La inflación es el aumento continuado de los precios de los bienes y servicios que ocasiona que nuestro dinero cada vez valga menos. Una inversión que puede resultar rentable en escenarios de aumento de la inflación es el oro.Si los precios bajan demasiado se produce una deflación que puede ser perjudicial para la economía pues los consumidores retrasan sus decisiones de compra a la espera de que bajen los precios. Aumenta el ahorro ya que el valor del dinero será mayor en el futuro. El desempleo también crece por la reducción de ingresos de las empresas. Los tipos de interés caen drásticamente lo que beneficia a los bonos a largo plazo que ven aumentar su precio.